EL ABECÉ DEL CUIDADO DE LA PIEL, SEGÚN EXPERTA
UNA RUTINA DE CUIDADO FACIAL PUEDE SER TAN COMPLEJA O TAN SENCILLA COMO EXIJAN LAS NECESIDADES DE CADA PIEL. AQUÍ LAS RECOMENDACIONES DE UNA ESPECIALISTA
Poseer una piel radiante no depende únicamente de la genética; los hábitos, ya sean buenos o malos, se reflejarán inevitablemente en la apariencia y salud general del cutis. Ante el constante bombardeo de reseñas de productos y la abrumadora cantidad de “lecciones infalibles” de seudomédicos en redes como Tiktok e Instagram, Kathya Chinchilla, especialista en Dermatología y Dermatopatología, aclara que la rutina de cuidado facial puede ser tan simple o compleja como lo requieran las necesidades de cada tipo de piel.
En última instancia, este acto de cuidado es personalizado pero se resume en tres pasos básicos e imprescindibles: limpieza, hidratación y protección solar.
Los tres básicos
El objetivo fundamental de cualquier rutina es preservar la salud de la piel y, al mismo tiempo, abordar “defectos” o concentrarse en áreas problemáticas.
No obstante, “a medida que la piel cambia, ya sea por la edad o afecciones, también lo harán los productos”, asegura Chinchilla.
En esta línea, la limpieza se erige como el pilar esencial del cuidado facial. Se recomienda optar por dermolimpiadores suaves, preferiblemente con un ph ligeramente ácido y libres de álcalis. Existen opciones específicas para cutis grasos con tendencia a acné, secos, sensibles, atópicos, con rosácea e incluso para tratar problemas de pigmentación.
Según la experta consultada, este producto puede ser “aclarado con agua, agua micelar, leches desmaquillantes, agua lipídica o desmaquillantes bifásicos”.
La razón es clara: atrapan, eliminan, disuelven y retiran las impurezas de la piel.
Otras pautas para el cuidado facial
En algunos tipos de piel, como la piel seca o sensible, no es recomendable utilizar dermolimpiadores de enjuague dos veces al día. Por la mañana, es suficiente con lavar el rostro únicamente con agua. Asimismo, la hidratación es un paso que debe llevarse a cabo dos veces al día: por la mañana, después del baño y por la noche.
La protección solar no es negociable y debe aplicarse cada mañana, replicándolo cada tres horas. Si bien es crucial optar por un filtro con FPS superior a 30, también se recomienda elegir aquellos que brindan protección contra los rayos infrarrojos
Vida
es-hn
2023-12-02T08:00:00.0000000Z
2023-12-02T08:00:00.0000000Z
https://grupoopsa.pressreader.com/article/282020447058859
Grupo OPSA
![](https://r.prcdn.co/res/es-mx/g15064/t457226818/2/images/toolbar-logo.png)